Las personas somos buenas por naturaleza, pero las cosas que nos van pasando en la vida y la educación que recibimos hace que a veces nos relacionemos de formas violentas. Vamos repitiendo comportamientos aprendidos en la familia, en la escuela, por los medios de comunicación sin reflexionar en ellos.
En una relación violenta nadie se siente bien, ni el agredido, ni el agresor. Claro que de forma diferente.
Te comparto un cuento para leer en familia: La Cenicienta que no quería comer perdices
La Cenicienta que no quería comer perdices
Nunila López Salamero. Ilustraciones: Miryam Cameros Sierra
No hay comentarios.:
Publicar un comentario